Las sirenas están estos días de moda por una adaptación de una adaptación de un cuento. Hoy te cuento cuál es el origen de las sirenas, que ya veras que tiene muy poco que ver con el cuento y sus adaptaciones.
Las sirenas en la mitología griega
El origen de las sirenas lo encontramos en la mitología griega, aunque entonces eran muy diferentes de lo que entendemos hoy por sirenas.
Las sirenas eran seres con cuerpo de ave y cabeza y cuello de mujer. En ocasiones también aparecen con medio cuerpo de mujer y parte inferior de ave (al estilo de los centauros). No eran criaturas hermosas, pero sí tenían una voz hipnótica con la que atraían a los navegantes que pasaban frente a sus costas, en la isla de Sorrento, y los conducían a la muerte.
Según las fuentes antiguas, descendían de Aqueloo, un dios fluvial, y de una de las Musas. Tampoco se ponen de acuerdo en su número, aunque se suele decir que eran cinco.
Tenemos también diferentes versiones sobre su conversión en estas criaturas híbridas. En un relato se dice que las sirenas eran compañeras de Perséfone y que Deméter las castigó por no impedir que Hades raptara a su hija. En otras versiones, las alas son un regalo de Zeus para perseguir al secuestrador. Incluso hay quien dice que fue Afrodita quien las convirtió en bestias por envidiar su belleza, aunque como se las suele relacionar con el mundo de los muertos, en general se prefiere la historia de Deméter como origen de las sirenas.
En cualquier caso, el testimonio más antiguo en el que aparecen es en el famoso episodio de la Odisea de Homero: Odiseo, durante su viaje de regreso a Ítaca, pasa junto a la isla de las sirenas y logra evitar el hechizo de su canto haciéndose atar al mástil, mientras el resto de la tripulación usa tapones de cera. Homero en ningún momento nos dice si eran medio peces o medio aves, eso llegó de la mano de otros autores. Lo que sí dice es que vivían en un prado junto al mar, rodeadas de huesos humanos.
El origen de las sirenas con cola de pez
Al llegar la Edad Media, muchos mitos griegos fueron adoptados con intención moralizante. El de las sirenas no fue una excepción: se convirtieron en un símbolo de la lujuria, y atraían con su canto a los hombres virtuosos y los llevaban al mal camino 😅
Sin embargo, durante buena parte de esta época las sirenas seguían siendo mitad mujer, mitad ave.
El primer texto en el que aparecen las sirenas con cuerpo de mujer y cola de pez fue el Liber Monstruorum de diversiis generibus, una obra anónima escrita a finales del s. VII, principios del VIII. Durante un tiempo los dos tipos de sirena (las híbridas de ave y las de pez) convivieron; incluso apareció un híbrido triple: cuerpo de mujer, cola de pez y patas de pájaro.
Para finales de la Edad Media la versión de mujer hasta la cintura con cola de pez se impuso, y fue la que se mantuvo en el Renacimiento, donde ya no aparecen las sirenas-pájaro.
¿Y por qué se convirtieron las mujeres-pájaro en mujeres-pez?
Pues no está muy claro 😁
Una de las teorías más comunes es que fue por influencia de los tritones, que en realidad fueron los únicos seres de la mitología griega que sí eran mitad humano, mitad pez. También pudieron tomar rasgos de las nereidas, las ninfas marinas que vivían en el Mediterráneo.
Tanto los tritones como las nereidas desaparecieron del arte y la literatura de la Edad Media. Es posible que los autores confundiera o, mejor aun, combinaran rasgos de las tres criaturas y las fundieran en una sola, las sirenas.
Las sirenas no son únicas de la mitología griega, las encontramos en otras muchas culturas. ¿Quieres que te hable en otro artículo de ellas? 😃